jueves, 17 de octubre de 2019
Homenaje a Tamara Castro, por González Guillermo y Versos Para Tamara
sábado, 12 de octubre de 2019
Las Campanas de Tucumán
viernes, 11 de octubre de 2019
El folclore argentino llora la muerte de Tamara Castro
Hondo pesar en el ámbitomusical por el fallecimiento de la destacada cantante, quien fueuna de las abanderadas de la "nueva camada" de intérpretesregionales. Viajaba junto a su marido hacia Chivilcoy para actuaren un festival.
Diario Epoca – El folclore argentino llora la muerte de Tamara Castro
Como tantos otros talentosos del folclore argentino, Tamara Castro,quien falleció ayer en un accidente automovilístico,eligió el camino más esforzado y quizás elmás valioso para difundir sus canciones, recorriendo desdehace más de 20 años peñas, clubes y festivalespopulares de todo el país.
Así la encontró la muerte junto a dos compañeros,justamente cuando viajaban hacia el encuentro de su públicoen la localidad bonaerense de Chivilcoy, donde tenía previstoofrecer un recital, como parte de una gira que inició hacedías y que la había llevado a Rafaela, en la provinciade Santa Fe.
El accidente ocurrió en la Ruta provincial 13, a 40 kilómetrosde esa ciudad santafesina, cuando ella y sus dos acompañantesviajaban hacia Chascomús -donde recogerían a lasecretaria de su representante- y luego seguirían viajerumbo a Chivilcoy.
Nacida el 4 de diciembre de 1972 en Ensenada, partido de La Plata,la cantante y guitarrista se crió y pasó toda suvida en la localidad bonaerense de Coronel Brandsen, donde a los3 años empezó a concurrir a clases con Oscar Murilloy Mabel Pimentel, fundadores del "Ballet Brandsen".
La cantante, que por cierto espíritu estético yactitud generacional pertenece a la denominada "nueva camada"del folclore argentino, pasó su niñez y adolescenciahaciendo danzas, participó de un coro, hizo teatro, ademásde tocar en la Banda Municipal de Brandsen.
A los 11 años recibió su primera guitarra y a los12 ya participaba en peñas y festivales locales, hastaque a los 17 viajó a su primer certamen regional en CityBell, donde obtuvo el primer puesto solista vocal femenino.
Ese fue el puntapié inicial para una carrera exitosa basadaen su talento para componer y cantar folclore, pero tambiénen la fuerza y la perseverancia para recorrer sin descanso, desdeentonces y hasta la fecha, cientos de certámenes municipales,provinciales y nacionales.
A los 20 años, luego de terminar sus estudios secundarios,viajó a la Capital Federal para asistir al Instituto NacionalSuperior del profesorado de Folclore y conoció a JorgeMilikota, compositor y músico con quien empezó agrabar demos y comenzó a presentarlos en público.
Tocando en una parrilla de General Rodríguez para ganarsela vida, fue descubierta por Titán Amorena (dueñodel sello DBN), quien le hizo firmar su primer contrato para unadiscográfica, hecho del cual en 1998 nació "Pasiones",su primer disco.
Ese mismo año actuó por primera vez en el escenariomayor del Festival de Cosquín y también lo hizoen el Festival de Baradero, donde presentó sus cancionescon muy buena acogida del público, sus colegas y la prensaespecializada.
En 1999, luego del moderado éxito de "Pasiones",editó su disco "Revelaciones", al que siguieron"Resplandor" (2000), "Lo mejor de mí"(2002), "Endechas" (2004) y "La Patria digna"(2005).
En esos álbumes demostró que, junto a ritmos propiosdel folclore argentino, como la zamba, la chacarera, el gato,los valsecitos y el takirari, podía teñir a lasletras y la poesía de sus canciones con preocupacionesy palabras de un alto contenido social.
Un adiós a Tamara Castro: cuando el canto argentino perdió parte de su sentimiento y esencia
Un adiós a Tamara Castro: cuando el canto argentino perdió parte de su sentimiento y esencia | Análisis
Con la trágica muerte de Tamara Castro, ocurrida entre las localidades santafesinas de Ataliva y Humberto Primo, el canto argentino pierde a una de sus voces más sobresalientes y a una verdadera obrera que con voluntad inquebrantable, peleó desde muy abajo el lugar que con sobrados méritos había alcanzado. No pertenecía al reducido grupo que se disputa cada año los primeros lugares por convocatoria en los grandes festivales. Junto a varios calificados artistas, se sentía cómoda ahi, en una segunda línea y tomando distancia de la voracidad del mercado ante el que no claudicó y al que no le entregó su arte. La sentencia Yupanquiana era la bandera que identificaba su destino cantor: " La luz que alumbra el corazón del artista, es una lámpara milagrosa que el pueblo usa para encontrar la belleza en el camino, la soledad , el miedo, el amor y la muerte. Si tu no crees en tu pueblo, si no amas, ni esperas, ni sufres, ni gozas con tu pueblo, no alcanzarás a traducirlo nunca".
Sin demagogia, sin doble discurso, Tamara supo traducir a su pueblo sin traicionarlo jamás. Tal vez porque no le entregó su voz a los mercaderes, era resistida por algunos personajes con alguna cuota de poder en el ambiente en el que se proyectan las "figuras".
El poeta Jorge Mlikota dijo de ella hace un tiempo: "Tamara Castro es natural, espontánea; admirada y resistida; es un diamante que brilla conservando el barro que le dio orígen; es sensible, inteligente y tiene el tiempo a su favor".
Precisamente con el autor de "Jazmin de luna", encontró la obra con la que su canto comenzó a cobrar altura. Aunque para decirlo correctamente, la "Zamba de amor en vuelo" y la cantora, se necesitaban mutuamente.
No fue casualidad que un día en la casa de Jorge Mlikota, Tamara Castro, nacida el 4 de diciembre de 1972 en el Partido Bonaerense de Ensenada y radicada desde los tres años en Brandsen, encontrara entre los escritos del poeta, esa media zamba que de inmediato colgó en su garganta para llevarla siempre por todos los caminos como su propia identidad... "Estremecidos de cielo/ yo vi tus ojos llorar / La noche pide guitarra/ la zamba busca el camino/yo no te puedo olvidar".
Con 34 años, la carismática artista había logrado un prolífero aporte al cancionero nacional con sus obras "Pasiones" (1997) , "Revelaciones" (1999), "Resplandor" (2000), "Lo mejor de mi" (2002), "La Patria digna" (2003) y "Vital" (2006). El comienzo de su trabajo artístico de 2007, estaba programado para el viernes 5 de enero en Diamante en el Festival Nacional de Folklore. Posteriormente tenía previsto participar del Festival de la Canción en Viña del Mar y en el Festival de Cosquín, donde éste año recibió una distinción por la interpretación de la obra "Paradojas" de Jorge Mlikota.
En la madrugada del 8 de diciembre, a solo cuatro dias de haber cumplido 34 años, Tamara, colgó en los aires santafesinos sus últimas canciones. A las diez y media de ese mismo día la tragedía quebró el ala que canta; la muerte silenció su garganta y llenó de dolor el corazón de quienes supimos de su calidad humana, de quienes disfrutamos de sus ocurrencias, de esa alegría que mostraba arriba de los escenarios y en las reuniones con amigos. Generosa, solidaria, informal, intuitiva, Tamara era el canto primitivo de la tierra trepándose a su garganta.
Jorge Mlikota ha perdido a una aliada. Con la muerte de la cantora, los poemas permanecerán silenciados porque la musicalidad de su garganta ya no podrá darles vuelo. Ya no la veremos vestida de negro y de sombrero abrazada a los seis rumbos sonoros, vital y necesaria... No estará, "pero ninguna tumba guardará su canto".
Los Carabajal y Tamara Castro en Boedo y Tamara elogia a Oscar Defranco
FolkloreCLUB -
El viernes 24 de junio fue el turno de la despedida, de los escenarios de Capital Federal, de Lucio Rojas del grupo Los Carabajal, y el viernes 1 de julio, brilló el canto de Tamara Castro. Cada uno por su lado, hicieron bailar a fuerza de chacarera al público de La Señalada.
“Al primero que esboce una sonrisa por mis medias, le cobramos el doble la entrada”, fue la amenaza que disparó con simpatía desde el escenario Tamara Castro, al quitarse las nuevas botas que estrenó, en la noche del viernes 1 de julio de La Señalada.
Su presentación se concretó pasadas la 1 de la madrugada y se extendió hasta las 2:40. Tamara entabló una amistosa relación con el público y dio lucha, con un variado repertorio, a un estado gripal que la acompaña desde hace un mes.
Un marco calido permitió el galope fuerte de las interpretaciones de Tamara Castro. Las canciones que protagonizaron la noche fueron, entre otras: “Cristo de arena”, “Flor amarilla”, “La alucinada”, “Nostalgias”, “Zamba de amor en vuelo”, “Corazón caprichoso”, “Lucerito alba” y “Santiago de los duendes". En el bis, un tema pedido desde el principio, “Cosechero”.
En el show invitó a Ezequiel Amaya, quien interpretó la chacarera “Déjame que me vaya” y con Alejandro, del grupo Los del Cerro, cantaron a dúo “La añera”.
En una charla amena, Tamara nos contó: “Siempre es un placer cantar acá, la gente es muy calida”. En cuanto a sus proyectos detalló: “Estamos entrando en la sala de grabación la semana que viene. Calculo que en septiembre va a estar en la calle el nuevo disco que va a tener un repertorio inédito, tradicional y romántico”.
Para despedirnos, agradeció: “Yo he visitado el sitio y les agradezco por haberme puesto a mi, gracias a FolkloreCLUB. Deseo que sigan así porque lo visitan mucha gente”.
La noche de Tamara Castro dejó vislumbrar el rostro de una persona humilde, gentil y solidaria. Porque no solo tuvo el lindo gesto de dar un espacio a nuevos intérpretes, sino que también recibimos la noticia que se concretó un maravilloso proyecto. Grabó el disco “Primero de abril” con la ilusión de juntar fondos para destinarlos a la sala de terapia intensiva del hospital de su ciudad natal, Coronel Brandsen.
Tamara Castro, una clase de austeridad en Cosquín y Lindo reportaje a Tamara
29/1/2004 | 09:00 | Pudo haber cantado cinco temas, pero decidió hacer uno menos, para que otros artistas dispusieran de un poco más de tiempo en el escenario "Atahualpa Yupanqui". "Sólo se trata de compartir", afirma Tamara Castro y agrega que, si la gente que tiene poder tuviera la conciencia de lo que es realmente compartir, se podría convivir mucho mejor.
Pudo haber cantado cinco temas, pero decidió hacer uno menos, para que otros artistas dispusieran de un poco más de tiempo en el escenario "Atahualpa Yupanqui".
"Sólo se trata de compartir", afirma Tamara Castro y agrega que, si la gente que tiene poder tuviera la conciencia de lo que es realmente compartir, se podría convivir mucho mejor.
"Y aquí, en Cosquín, pasaría lo mismo. En este festival que tiene el fuego sagrado, es necesario compartir. Caso contrario, ni siquiera se podría mantener", asevera.
Sencilla y auténtica, Tamara también fue protagonista del 44º Festival Nacional de Folklore. Como siempre, Cosquín le tributó fervorosos aplausos, por las canciones que ofreció.
Después de su actuación, la folklorista de Coronel Brandsen marcó aspectos que hacen tanto a su trabajo profesional como a su papel maternal, el que, según afirma, ocupa la mayor parte de su tiempo.
Su hija mayor (Tairch, de dos años y cuatro meses) fue presentada en sociedad durante el festival coscoíno de 2002, y hace un mes y cinco días, nació Malena.
"Son mis dos motorcitos. La mayor me percibe tan entusiasmada cuando preparo las cosas que me compromete más. En ellas descansan todos mis anhelos y ansiedades. Cada parte de mi trabajo está supeditada a mis niñas, quienes tanto me influencian sobre los escenarios", admite Tamara.
De su quinto disco (Patria digna), sostiene que implica una expresión de deseos "por ese país que los argentinos nos merecemos y que vamos en camino de lograr: una verdadera patria digna para nuestros hijos".
Claro que advierte que no sólo se trata de esperanza, sino que es preciso que todos nos comprometamos a aportar esfuerzos y madurez.
En el disco, hay temas relacionados con las provincias y las regiones, un tango (Nostalgias) y el triunfo del cual salió el nombre del CD.
"¿Cómo se me ocurrió incluir ese tango? Estaba en Brasil cuando me pidieron Nostalgias, que es complicadísimo para tocar en guitarra. Pero me animé a la travesura y a la gente le encantó".
A Buscándote, otro tema del álbum, lo describe como una zamba muy especial.
"No es romántica, como cree la mayoría, sino una experiencia de mi vida que le comenté a Mlikota --su autor-- respecto de mi papá, a quien no he conocido, pero muchos dicen que ha sido un afamado cantor de pueblo; muy afamado".
Pese que aun hoy, con cinco compactos en las disquerías, el público le sigue pidiendo Zamba de amor en vuelo, ella no se molesta y sostiene que es un tema espectacular.
Roberto Oña
" Por Tamara " Ivana Cestari y " La Gran Peña del Cielo "
miércoles, 9 de octubre de 2019
De puño y letra de Tamara, su Escultura y escrito de su mamá
Las decimoquintas
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